El retinol es la vitamina A en forma de activo cosmético, pero no es el único activo derivado de esta vitamina, sino que forma parte de la familia conocida como retinoides. Si hay algo en lo que cosmetólogos, esteticistas y otros expertos en el cuidado de la piel están de acuerdo, es en que, ante un rostro fotoenvejecido, si se quiere mejorar el aspecto general de la piel, es importante recurrir al retinol.
De entre los retinoides, podemos encontrar algunos de venta al público y uso cosmético, y otros ya considerados fármacos prescritos por el dermatólogo. El ácido retinoico, por ejemplo es del segundo tipo, y si bien es cierto que es más efectivo que el retinol, también es cierto que irrita más. No obstante, el retinol es el activo cosmético de uso tópico del que existen mayor número de estudios tanto médicos como científicos que hablan de su eficacia en los síntomas comunes del envejecimiento cutáneo, además de tener un efecto despigmentante, para el tratamiento de manchas en la piel.
También es interesante reseñar su campo de aplicación contra el acné. Algunos tratamientos médicos contra el acné se basan también en la vitamina A. Debemos saber que el exceso de ingesta de esta vitamina puede tener importantes efectos secundarios, sequedad, transaminasas, colesterol, etc. Si bien un tratamiento a base de retinol de uso tópico y cosmético, es menos potente, también es menos agresivo, y puede tener en muchos casos una eficiencia más que suficiente.
El retinol actúa penetrando en las capas profundas de la piel, gracias a su ligero peso molecular, y estimula la producción de colágeno y la elastina. Esto lo convierte en un gran aliado de tratamientos como la radiofrecuencia o el HIFU, de los cuales hemos hablado en otras entradas de nuestro blog. Interesante tener en cuenta cómo actúan estos tratamientos en la producción del colágeno.
Un factor diferencial del retinol también frente a otros cosméticos es que también mejora el aspecto de la capa exterior de la piel., mejora el proceso de renovación celular, por lo que la piel muerta se va rápido y aparecen capas de piel nuevas más luminosas, también regula el proceso de queratinización para suavizar la tez.
Cabe la posibilidad de que pueda irritar las pieles sensibles y no debe usarse si va a exponerse la piel al sol. Es un principio activo muy eficaz, pero de alguna manera fotosensibiliza la piel, por lo que se debe evitar la exposición al sol, y utilizarlo siempre en casa o por la noche, y combinarlo con un factor de protección alto.
A modo de resumen, podríamos decir que las grandes cualidades de este principio activo son:
- Promueve la producción de colágeno y elastina, y mejora la renovación celular cutánea.
- Mejora la textura y la hidratación de la piel
- Revierte el fotoenvejecimiento
- Regula las glándulas sebáceas de la piel, por lo que controla la producción de grasa
- Mejora las arrugas y líneas de expresión
Existen productos en el mercado, a precios desorbitantes y con un bajo porcentaje de principio activo. En Estética y Bienestar trabajamos con un retinol combinado con aloe vera al 50% de cada uno, Con esto tendríamos todas las bondades del retinol (importante de uso cosmético, no hablamos de fármacos), atenuando sus posibles efectos secundarios con las propiedades al aloe vera. Indicar también que el aloe vera que utilizamos sería la barbadensis miller, que es con diferencia la especie botánica que más principios activos posee.
El precio de nuestro retinol, ronda los 22 eur. 50 ml, por lo que no tiene competencia alguna en el mercado para su altísima concentración de principio activo.
Si bien, es importante tener en cuenta que, debido precisamente a este alto porcentaje de principio activo, se pueden tener sensaciones incómodas en la piel (percibirla estirada, tensada), rara vez irritada por la combinación con el aloe vera. Si esto sucede, la solución es fácil, simplemente espaciar las aplicaciones (no usar diariamente) y combinar con una buena hidratación.